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La orquídea mariposa es una de esas flores que parecen sacadas de un cuento. Elegante, exótica y sorprendentemente resistente, esta planta no solo embellece cualquier rincón del hogar, sino que también es muy fácil de cuidar si se siguen unas cuantas pautas básicas. También conocida como Phalaenopsis u “orquídea polilla”, debe su apodo a la forma de sus flores, que recuerdan a las alas de una mariposa en pleno vuelo.
Es la orquídea más vendida en floristerías por su capacidad de mantenerse en floración durante meses y su facilidad para adaptarse a interiores. Hoy te contamos todo lo que necesitas saber para cuidarla, disfrutarla y, si te animas, regalarla.
¿Por qué la orquídea mariposa es tan especial?
La orquídea mariposa no es solo una planta bonita. Es una de las especies más resistentes dentro de las orquídeas tropicales. Sus flores pueden durar entre tres y seis meses sin mostrar signos de envejecimiento, incluso durante el invierno. Con los cuidados adecuados, puede volver a florecer dos o tres veces al año, algo que muchas personas no saben.
Además, gracias a su forma estilizada y colores vibrantes, se ha convertido en un símbolo de elegancia. No es raro encontrarla decorando salones, oficinas, restaurantes y todo tipo de espacios interiores.

Un regalo con significado
Regalar una orquídea Phalaenopsis es regalar belleza duradera. A diferencia de otras flores que se marchitan en pocos días, la orquídea mariposa sigue floreciendo, recordándole al destinatario tu cariño por mucho tiempo.
En Floristería Sayde siempre puedes encontrar esta orquídea en maceta con presentaciones elegantes para regalar o decorar. Su presencia transmite calma, buen gusto y un toque natural que nunca pasa de moda.
¿Dónde colocar la orquídea mariposa?
La ubicación es clave. Esta planta necesita buena luz, pero no directa. Lo ideal es un sitio con luz media o brillante indirecta, como una ventana orientada al este. Si la luz es muy fuerte, como la del mediodía, es mejor filtrarla con una cortina fina.
Temperatura ideal: entre 18 y 25 ºC. Soporta picos más altos o bajos, pero si baja de 16 ºC o sube de 28 ºC durante mucho tiempo, pueden afectarse sus flores y hojas.
Evita colocarla cerca de corrientes de aire o radiadores. A la orquídea no le gusta el cambio brusco de temperatura.

¿Cómo regar la orquídea mariposa?
Uno de los errores más comunes es regarla en exceso. Esta orquídea prefiere menos agua que más. Solo debes regarla cuando sus raíces se vean blanquecinas. Si están verdes, significa que todavía tienen humedad.
En primavera y verano, riega una vez a la semana. En otoño e invierno, cada 10 días. El agua debe estar a temperatura ambiente o tibia. Si puedes usar agua de lluvia o filtrada, mejor. Si usas agua del grifo, deja que repose unas horas antes.
Método de riego por inmersión
Llena un recipiente con agua y sumerge la maceta durante 2-3 minutos. Luego deja escurrir bien la planta antes de volver a colocarla en su lugar. Este método asegura que las raíces absorban justo lo necesario, evitando el exceso de humedad.
Cómo saber si tu orquídea necesita agua
Sus raíces son un buen indicador. Las raíces secas se ven de color blanco plateado, mientras que las hidratadas son verdes o verdosas. También puedes tocar el sustrato: si está seco, es hora de regar.
Importante: nunca dejes agua acumulada en el plato debajo de la maceta. A la orquídea le gusta la humedad ambiental, pero no que sus raíces estén encharcadas, ya que se pudren fácilmente.
Cuidados extra para que florezca más veces al año
Mucha gente cree que la orquídea solo florece una vez, pero esto no es cierto. Con unos cuidados mínimos, puede volver a florecer varias veces al año.
- No cambies la maceta después de comprarla en flor. Espera a que termine su floración.
- Usa fertilizante específico para orquídeas. En primavera-verano, una vez a la semana. En otoño-invierno, una vez cada 3 o 4 semanas.
- Limpia sus hojas con un paño húmedo. Esto facilita la fotosíntesis y previene enfermedades.
- Corta los tallos después de la floración. Esto estimula la salida de nuevos brotes.
Errores comunes al cuidar una orquídea mariposa
- Ponerla al sol directo
- Regarla demasiado o muy poco
- Dejar agua en el fondo del recipiente
- Trasplantarla mientras está floreciendo
- Usar macetas sin agujeros de drenaje
- No fertilizarla en su etapa de crecimiento
Evitar estos errores es clave para que tu orquídea viva muchos años y florezca una y otra vez.
Curiosidades que no sabías sobre la orquídea mariposa
- La palabra «Phalaenopsis» viene del griego y significa «parecida a una polilla».
- En Asia, esta flor representa abundancia, buena fortuna y armonía.
- Hay variedades con flores blancas, rosas, moteadas e incluso azules (aunque estas últimas suelen estar teñidas).
- Las raíces aéreas que salen de la maceta no deben cortarse; son parte del ciclo natural de la planta.
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Recomendación de lectura externa
Si deseas profundizar aún más en los cuidados de esta planta fascinante, te recomendamos esta guía visual con consejos prácticos:
🔗 Orquídea Phalaenopsis: cuidados
Una lectura fácil y completa para aprender desde cómo trasplantarla hasta cuándo fertilizarla.